Lo más destacado del mes de enero sitúa al nombre de Joe Biden, presidente de los EEUU, en primer plano. Anunció hacia mediados del mes un paquete de estímulos por valor de 1,9 Bn USD (~8% del PIB EEUU) para combatir la emergencia sanitaria y alejar el riesgo de la recesión provocada por la pandemia. El plan se compone de varias partidas, una de ellas de 400.000 Mn USD para combatir directamente la pandemia, con medidas básicas como acelerar la distribución de la vacuna y tratar de vacunar a 100 millones de estadounidenses en un periodo de 100 días. Otros 350.000 Mn USD se destinarán a ayudar a los Gobiernos estatales y locales para salvar los déficits presupuestarios. La parte principal de este gran paquete de estímulos es para trabajadores y familias, con un billón en ayudas consistentes en cheques directos por valor de 1.400 dólares, subsidios de desempleo más generosos, bajas remuneradas para enfermos y subsidios más amplios para cuidar a los hijos. Otros 440.000 Mn USD se destinarán a apoyar a las pequeñas y medianas empresas y a comunidades especialmente afectadas por la pandemia.
Política Monetaria se mantiene ultra-laxa.
Los mensajes de política monetaria tanto de FED como de BCE continúan apuntando a un sesgo marcadamente acomodaticio que se va a mantener invariable durante varios meses y se ha insistido en que un cambio de actitud será debidamente telegrafiado con tiempo suficiente. Ante cuestiones relacionadas con la formación de aparentes burbujas en algunos mercados no se mostró preocupación.
Covid 19.
Los problemas relacionados con el ritmo de vacunación, especialmente en algunos países como Europa están fomentando la aparición de cierta inestabilidad en los mercados. Es de suponer que la normalización en este aspecto debería traer igualmente tranquilidad a los activos de riesgo.
Resultados empresariales.
No han hecho mas que comenzar, pero hasta ahora el balance está resultando favorable, con sorpresas positivas en las principales compañías que ya han publicado, especialmente en EEUU, donde el número de publicaciones ha sido más relevante. En Europa de momento pocas referencias.
Destacamos….Caso GameStop,
Una compañía norteamericana de venta de videojuegos que no supo adaptarse a la revolución streaming del sector y que lleva años registrando pérdidas tanto en su cotización como en sus cuentas, ha acaparado un fuerte protagonismo en los últimos días a nivel global, ya que en pocas sesiones ha registrado una importante revalorización, alentado por la entrada en su capital de algunos grandes inversores y sobre todo por una campaña a favor de pequeños accionistas minoristas a través de foros, en contra de las operaciones especulativas en corto de algunos Hedge Funds. Tal es así que algunos de esos Fondos, como Point72 o Melvin Capital tienen seriamente comprometida su supervivencia actualmente. Más allá de entrar a valorar la ética o legalidad de este tipo de intervenciones en el mercado, por uno u otro lado, creemos que sí es importante destacar que el inversor minorista (~20% de la negociación en EEUU) ha demostrado que tiene capacidad de organizarse y realizar movimientos muy intensos en el mercado, no necesariamente racionales, pero que si pueden provocar intensas reacciones en valores cotizados y poner en jaque a grandes fondos de inversión.