Caja Rural del Sur ha acogido la presentación de la 14ª edición del Barómetro Económico de Sevilla y provincia, publicación patrocinada por la entidad y coordinada por la profesora del Departamento de Economía de la Universidad Loyola y directora ejecutiva del informe, María del Carmen Delgado López. En la presentación han participado el decano del Colegio de Economistas, Francisco J. Tato Jiménez el economista colegiado y catedrático de Economía de la Universidad Loyola, Manuel Alejandro Cardenete, y Rafael Peral, responsable de Instituciones, Colectivos y Convenios de Caja Rural del Sur.
Del resultado del estudio, se ha concluido que las estimaciones indican que el PIB de la provincia de Sevilla podría crecer un 3,8% en 2022, tres décimas por debajo de lo estimado en el anterior número del barómetro sevillano. Esta revisión a la baja es consecuencia de las tensiones inflacionarias reflejadas en los costes de producción, lo que aumenta los niveles de precios, y disminuye, a su vez, el poder adquisitivo de las rentas y los ahorros de los hogares. Para 2023, se espera una moderación del crecimiento del PIB provincial hasta el 1,2%.
Además, la inflación continuará elevada en los próximos meses, si bien con una tendencia a moderarse, en línea con el comportamiento reciente de los precios de materias primas y productos energéticos. El crecimiento interanual del IPC por encima del 10% en los últimos meses motiva en cualquier caso una revisión al alza de la previsión anual de crecimiento de este indicador, que se sitúa en el 9,4% para 2022 (frente al 7,9% estimado en el anterior barómetro). En 2023, sin embargo, este crecimiento podría moderarse hasta alrededor de un 3,1%.
Así mismo, se indicó en la presentación que, si bien la recuperación del turismo y el consumo de los hogares siguen siendo la base el crecimiento económico, la elevada incertidumbre del escenario económico plantea la posibilidad de entrar en recesión técnica en los siguientes trimestres.
Respecto a los principales indicadores reflejados en el Barómetro, la creación de Sociedades Mercantiles en Andalucía y Sevilla se mantiene en buenos niveles si bien mantiene un comportamiento volátil. Respecto a la matriculación de vehículos en la primera mitad de 2022 continúa con una tendencia negativa, también derivada de la escasez de componentes y de los cambios de hábitos de consumo.
El Índice de Confianza Empresarial se recuperó a niveles prepandémicos en 2021, aunque sufrió una recaída en 2022, consecuencia de la incertidumbre generada por la guerra y la inflación. En el último trimestre, esta confianza parece haberse recuperado, posiblemente por la fuerte recuperación del turismo estival, por tanto, habrá que observar la evolución futura ante la actual incertidumbre del escenario económico.
El turismo, por su parte, ha registrado un fuerte repunte en este periodo, si bien en el mes de julio se observa una disminución del ritmo de crecimiento del número de pernoctaciones. Las pernoctaciones totales para Andalucía y Sevilla continúan por debajo de su valor normal, aunque relativamente cerca de recuperarlo.
La inflación se sitúa en máximos no registrados desde la Crisis de Petróleo de 1973 y es el principal factor negativo de la actual situación económica. La tasa de crecimiento interanual del Índice de Precios al Consumo continúa superando por tres meses consecutivos los dos dígitos. En la provincia de Sevilla, la variación interanual del IPC en agosto alcanzó el 10,9%, un incremento sin precedente histórico desde hace más de tres décadas.
La energía podría seguir ejerciendo presión sobre la inflación, por lo que esta se mantendrá elevada en los próximos meses, pero la reciente disminución de los productos energéticos podría moderar y relajar las tendencias inflacionarias en los próximos meses, siempre y cuando esta tendencia no cambie, ni se llegue una espiral precios-salarios. Los bajos niveles de la tasa de desempleo suponen una de las buenas noticias del escenario económico, que no parece haberse resentido en el segundo trimestre de 2022 ante la adversidad del panorama acontecido, lo cual puede estar relacionado con la recuperación del sector turístico a lo largo del año”, ha explicado la economista.
Respecto al índice BES, En el segundo trimestre de 2022, el valor se situó en 97,7 para Sevilla (frente al 97,3 del primer trimestre), y en 103,0 para Andalucía (frente al 96,6 del trimestre anterior). Estos valores confirman un crecimiento de ambas economías en el segundo trimestre del año.