En el aspecto institucional, la noticia estuvo en la reunión del G7 en donde se alcanzó un acuerdo para establecer un tipo mínimo en el Impuesto de Sociedades del 15%. La homogeneización en este impuesto, pretende evitar que las multinacionales trasladen sus beneficios a paraísos fiscales y de esta forma, tributen de forma efectiva en los países donde han generado los ingresos, lo que podría ayudar a los países a recaudar más impuestos de las grandes empresas, beneficiando así sus economías.

En cuanto a la actualidad económica, cabe resaltar la aceleración en el ritmo de expansión de la economía americana, con un mayor consumo ante la apertura de los negocios y el aumento de la movilidad. También hemos conocido buenos datos de empleo y un intenso crecimiento en el sector servicios. En Europa las ventas minoristas de abril muestran crecimientos significativos, en especial en España con un 41% interanual, lo que apoyaría la recuperación económica. También ha sido reseñable el dato de mayo de inflación en la eurozona, que alcanza el 2% por primera vez desde 2018, influida por el aumento del precio del petróleo, que sigue al alza, impulsado por la decisión de la OPEP y sus aliados de mantener la producción de forma controlada, adaptándola de forma progresiva a la recuperación de la demanda.

A España le corresponden algo más de 140.000 millones de euros entre transferencias y préstamos. Por ahora solo hemos solicitado 69.500 millones de euros asignados en subsidios no reembolsables y está previsto que recibamos 19.000 millones de euros del fondo de recuperación en 2021.

Otra noticia relevante este mes ha sido el anuncio por parte de la Comisión Europea de la primera emisión de deuda para financiar el Fondo de Recuperación cuyas primeras ayudas confía en que lleguen a los Estados miembros en agosto. Bruselas aprobará los planes de reformas e inversiones de los países europeos, pero con el visto bueno de la Comisión no es suficiente ya que es necesario además, que el plan de recuperación remitido por cada Gobierno sea aprobado por el resto de Estados miembros.

Y como dato positivo para la economía española, el Banco de España ha mejorado las previsiones de crecimiento del PIB para los próximos años dada la evolución sanitaria, las perspectivas económicas de los países del entorno y la llegada de los fondos europeos, cuyos efectos comenzarán a notarse principalmente a partir del próximo año.

Por su parte, el BCE reiteró en su última reunión, una vez más, su compromiso con el mantenimiento de unas condiciones financieras favorables, lo que apunta a que no hay prisa por retirar los estímulos monetarios, disipando así las dudas del mercado.

¿Qué está pasando con las bolsas?

En el último mes hemos asistido a un buen comportamiento de la renta variable tanto europea como americana, con los índices de las bolsas de la eurozona y americana, Eurostoxx 600 y S&P 500 respectivamente, en máximos históricos, impulsados por los sectores más cíclicos como autos, bancos y materiales. Además, esperamos en los próximos trimestres, que los resultados empresariales sigan mejorando tanto en ventas como en márgenes.

Tras la sana corrección de los mercados de la semana pasada, esperamos que el comportamiento de la renta variable siga siendo positivo. El optimismo que se respira en las economías se sostiene en indicadores como las ventas minoristas, la confianza del consumidor y en los paquetes de estímulos de los gobiernos, pendientes de su próxima implementación con el objetivo de impulsar infraestructuras, energías verdes y la digitalización.

En cuanto a las inversiones socialmente responsables, destacar que tras un 2020 excepcional, los índices sostenibles han registrado, en general, un peor comportamiento relativo desde mediados de enero, motivado por el repunte en los tipos de interés de largo plazo y en parte también, por la corrección tras las fuertes subidas del año pasado. No obstante, creemos que es una temática que a medio/ largo plazo va a tener un comportamiento positivo.

Europa tiene muy claro que quiere seguir liderando las inversiones socialmente responsables y Estados Unidos mantiene un compromiso firme en este sentido.

La sostenibilidad es un proceso transversal que aplica a todos los ámbitos económicos. La transformación de las economías ha comenzado, las empresas están revisando sus modelos de negocio en lo que se refiere a cuestiones medioambientales, sociales y de buen gobierno. El proceso es imparable.