En el momento de apostar por la sostenibilidad, una empresa debe tener claro qué recursos necesita para su actividad. Los PPA o Power Purchase Agreement son contratos que les permiten conseguir fuentes de energía renovable a un precio estable, por lo que son ideales para calcular su estructura de costos a largo plazo.

Estos acuerdos de compraventa pueden producirse entre un productor y un consumidor corporativo, que suele ser una compañía con grandes necesidades eléctricas, e incluso entre un desarrollador y un comercializador que revenderá la energía a precio de mercado.

Normalmente, la duración es de entre 5 y 10 años, dependiendo de si se produce la instalación de paneles fotovoltaicos u otras instalaciones en la sede de la empresa. En este artículo te explicamos qué características tiene esta modalidad y qué razones deberías considerar antes de contratarla.

El contrato PPA: una modalidad de cesión de energías renovables

La asesoría BloombergNEF llevó a cabo un informe titulado Corporate Energy Market Outlook, en el que daba cuenta de la importancia que tienen las energías renovables para las empresas de todo el mundo. La conclusión fue que se alcanzó un nuevo récord de energía limpia proveniente de PPA, con 19,5 gigavatios (GW) contratados por parte de 100 compañías de 23 países. Además, 13,6 GW de ellos se firmaron en Estados Unidos, 2,6 GW en Europa, Oriente Medio y África.

Los consumidores pueden disfrutar de muchas ventajas con las PPA, como la posibilidad de cumplir con la Ley de Cambio Climático que ha establecido el Gobierno para 2050 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas para 2030.

Pero además de reforzar su Responsabilidad Social Corporativa (RSC), pueden disfrutar de un precio fijo de energía trazable a largo plazo, protegiéndoles de las fluctuaciones que tienen lugar en el mercado. La adicionalidad que generan las PPA permiten hacer inversiones en activos renovables que reducen la producción de fuentes contaminantes.

Otro gran beneficio es que el precio es competitivo, con descuentos que pueden reducir el coste actual y futuro de la energía, lo que posibilita que se haga una planificación completa de la estructura de costes a largo plazo.

Los consumidores finales de la empresa también se ven favorecidos por la inversión en fuentes de energía renovables. La instalación de un parque solar o eólico es un gran reclamo para ellos, porque asocian la marca con valores de compromiso y confianza que les ayudarán a tomar decisiones de compra en el futuro. Finalmente, los productos PPA están asociados al perfil de cada cliente y ofrecen soluciones a medida según la disponibilidad que tenga.

El objetivo de los PPA es transitar hacia una economía sostenible que derive de una transición ecológica justa, cuidando del medioambiente e intentado combinar el desarrollo empresarial con el respeto por la biodiversidad del sistema. Una de sus principales características es la existencia del modelo productivo circular, que está basado en el reciclaje o la reutilización de los residuos para favorecer su aprovechamiento en segundas industrias.

¿Cuántos contratos PPA existen?

Los contratos PPA se definen por la localización que ocupan las instalaciones que contienen las energías renovables. Existen tres modelos distintos, comenzando por el PPA on-site, en el que el cliente recibe la electricidad de un proyecto que se ha construido dentro de su propia sede.

La preparación de las instalaciones puede llevar años, pero el gran beneficio es que se queda en la misma ubicación para proporcionar electricidad y otros recursos a la empresa o a un conjunto de ellas a largo plazo.

En el otro lado del espectro se sitúa el PPA off-site, que permite a la compañía conseguir energía renovable de unas instalaciones que están lejos de su propia localización. En este caso el ahorro en costes de mantenimiento es evidente, pero el inconveniente es que podría haber problemas en la recepción de la energía.

En tercer lugar se encuentra el PPA virtual, basado en un acuerdo de precio entre el generador y el cliente, pero sin entrega física de energía. El contrato se basa en la factura que el cliente recibe de su comercializadora, apoyado en un recibo del desarrollador, que contiene el resultado del ajuste por diferencias entre el precio SPOT y el precio PPA acordado.

¿Tienes claro qué PPA vendría mejor para tu negocio? No te preocupes, porque antes de valorar las posibilidades deberías dar unos pasos previos que te faciliten la tarea. Prepara un análisis DAFO para conocer las posibilidades y las oportunidades de tu empresa, registra la variación de precios establecidos por el productor y evalúa tus expectativas económicas de aquí al futuro. En última instancia descubrirás que la sostenibilidad puede ser rentable, pero se necesita hacer un buen desembolso inicial y tener paciencia para ver los frutos.-