A la hora de elegir un préstamo personal, es importante tener en cuenta varios factores como tu situación personal, el estado de tus finanzas o el destino al que vas a dirigir el dinero. Es un proceso en el que necesitas evaluarte a ti mismo antes de solicitarlo para disfrutar de formación académica o, incluso, para comprarte un nuevo coche.

Lo mejor es contar con una serie de consejos como los que te ofrecemos a continuación, para que puedas vivir tranquilo y reduzcas toda la incertidumbre que hay alrededor de ellos. Tómatelo con calma, investiga todas las opciones a tu disposición y elige con seguridad el préstamo personal que más te interesa siguiendo los trucos que te enseñamos.

¿Cómo solicitar un préstamo personal con tranquilidad?

En primer lugar, analiza la situación económica de tus partidas. Recuerda que, en teoría, tus gastos no deberían superar el 40% de tus ingresos para que las deudas no terminen agobiándote a final de mes. El cálculo es fácil: si tus ingresos son de 2000 € mensuales, el gasto no debería ser superior a 800€.

Después, es conveniente que pienses en la cantidad que necesitas, ni más ni menos. Si estás pidiendo un préstamo personal es porque necesitas tener liquidez para un gasto presente o futuro, así que no caigas en el error de pedir más “por si acaso” para luego tener que devolver más intereses de forma innecesaria.

En tercer lugar, intenta ajustar los tiempos para devolver el dinero a la entidad. Suena fácil, porque cuanto antes entregues el dinero menos intereses tendrás que pagar. Cada día gastado es un día en el que tendrás que soportar un pago mayor al final del plazo.

Fíjate, también, si este producto bancario tiene períodos de carencias, lo que define la posibilidad de no pagar la cuota del préstamo (o pagar solo estos intereses) durante el tiempo que venga estipulado en el contrato. Es una forma de curarse en salud para enfrentarse a posibles problemas futuros de insolvencia, pero la contrapartida es que tendrás que pagar más intereses en el largo plazo.

La Tasa Anual Equivalente (TAE) es un factor muy importante a tener en cuenta, porque te indica el coste total que va a tener el préstamo. En ella van incluidas las comisiones, los intereses y los gastos. Esto significa que no debes fiarte si te ofrecen un préstamo sin intereses en el que la TAE no es del 0%. La calculadora del Banco de España es una herramienta muy útil que te ayudará a hacer tus cálculos antes de solicitar el préstamo personal.

No te olvides de solicitar a la entidad la información sobre aquellos productos vinculados que podrían costarte un suplemento al año. Cada uno de ellos podría tener un precio, que la propia entidad tiene que ofrecerte de forma obligatoria.

En cuanto al banco al que debes acudir para hacer la operación, intenta que esté regulado por el Banco de España, lo que te será de gran provecho para evitar problemas mayores como el pago de intereses o la falta de garantía de protección.

Este consejo parece un tópico, pero ¡no firmes nada si no lo has leído antes! Toda la información que viene recogida en los papeles es valiosa, como la garantía de desistimiento, que debe ser de 14 días por ley, o muchas otras condiciones de devolución de las que debes estar al tanto en el momento del pago.

Los préstamos personales son productos muy interesantes para hacer un viaje, permitirse un capricho o deshacerse de los gastos imprevistos que afectan a tu salud financiera. En el caso de que estés pensando en solicitar uno, puedes hacerlo en Caja Rural del Sur, donde podrás utilizarlo para lo que tú quieras, con la rapidez que necesitas y calculando tu cuota.

Si tienes dudas, puedes escribir al siguiente formulario o acercarte a tu entidad de confianza, donde un profesional te atenderá encantado. ¡No lo dudes y resuelve todas tus dudas!