La Unión Europea y el Reino Unido han dicho el adiós definitivo después de 47 años de relación. El nuevo acuerdo Brexit suaviza las negociaciones y las especulaciones que venían desarrollándose durante años, y propone un nuevo marco para comprender cómo va a ser la relación entre las empresas a partir de ahora.

Las imágenes del año pasado, en las que los eurodiputados cantaban y lloraban cogidos de la mano como símbolo de despedida, o la más reciente imagen retirando de forma definitiva la bandera británica del edificio del Consejo de Europa son identificativas de lo que ha significado todo este tiempo de relaciones emotivas entre los dos bandos. Ahora, con el acuerdo del 24 de noviembre que ocupa casi 2.000 páginas, se abre un nuevo horizonte que debemos entender para avanzar hacia el futuro.

El volumen de la relación exportadora de la UE a Reino Unido se estima en 700.000 millones. El Reino Unido, según datos del ICEX, es el quinto país de destino de la exportación española de mercancías (el 7% de las exportaciones acaban en tierras británicas) con casi 20.000 millones de euros en 2019. Andalucía se posiciona en el cuarto lugar dentro de las comunidades españolas que más niveles de exportación producen a ese país, con un volumen estimado de 2.300 millones de euros anuales.

¿Quieres saber de primera mano en qué consiste el nuevo acuerdo Brexit? Te enseñamos cómo repercutirá en los aranceles, la burocracia en el transporte de mercancías y la movilidad de las personas.

LOS ARANCELES: SIN PRESENCIA EN EL ACUERDO BREXIT

Todos estos años en el mercado único de la Unión Europea provocan que la nueva política arancelaria se vea con temor por parte de las empresas españolas y andaluzas. La Organización Mundial del Comercio (OMS) aplica, de media, un arancel del 3% y en muchos sectores, como algunos productos frescos supera el 30%, así que es normal que surja la desconfianza en el terreno de los impuestos internacionales.

Sin embargo, el acuerdo es muy claro en este apartado: se prevé el libre intercambio de bienes y servicios sin tarifas (aranceles) ni cuotas innecesarias (con el volumen máximo de cada producto).

El anuncio de un Brexit sin aranceles ha sido acogido con mucha alegría por parte del sector hortofrutícola de Andalucía, que podría ahorrarse unos 198 millones de euros. El mercado del Reino Unido recibe el 13% de las exportaciones andaluzas de frutas y hortalizas, con una factura que supone 780 millones de euros para la economía de la región. Las cifras establecen que provincias como Sevilla o Córdoba están aguantando el tipo y tendrán una buena entrada en el acuerdo Brexit, consiguiendo una facturación parecida a la del año 2019 con 2.042 millones de euros.

 LA DOCUMENTACIÓN LEGAL: MÁS COMPLICADA

El apartado negativo para muchas empresas de Andalucía es que esta reducción de aranceles vendrá acompañada por una mayor carga administrativa en las aduanas. La CEOE ya se ha quejado de las dificultades que habrá para que los camiones o los ferrys consigan llegar a las costas británicas para vender sus productos. La presidenta de CEOE Internacional, Marta Blanco, explica en Cinco Días que, hasta ahora, “las empresas españolas solo tenían que emitir una factura y una orden de transporte para el intercambio de mercancía”.

El Ejecutivo andaluz propuso en 2019 un Programa andaluz de medidas de preparación y contingencia ante la retirada del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit), un documento en el que se responde a las principales preocupaciones de ciudadanos y empresas ante posibles eventos que podrían suceder a partir de ahora. ¿Qué sucederá con Gibraltar? ¿Qué sectores recibirán protección del Gobierno de la región? En él pretende darse una solución a este aumento progresivo en la carga administrativa durante el transporte de mercancías.

LA LIBERTAD EN LA MOVILIDAD: UN CAMBIO DE PARADIGMA

La novedad que recoge el acuerdo Brexit es que, al contrario que las mercancías, ya no habrá libre circulación de personas residentes o extranjeras en las fronteras del Reino Unido. Esto significa que los ciudadanos de este país no podrán trabajar, estudiar, iniciar un negocio o vivir en la UE y al contrario con libertad.

La nueva situación requiere que los visitantes del Reino Unido a la UE cuenten con un pasaporte válido (que no caduque antes de seis meses), junto con un visado para estancias de más de 90 días en un período de 180 días; mientras que hay ya controles fronterizos adicionales; y los pasaportes de mascotas de la UE ya no son válidos.

Las recomendaciones de viaje del Gobierno británico establecen que cualquier ciudadano español o de la UE puede visitar el Reino Unido solo con el DNI o el pasaporte hasta el 1 de octubre de 2021. A partir de ese día, será necesario un pasaporte en regla. Este no es el caso de las personas que tienen permiso de residencia o los trabajadores transfronterizos con carné, que pueden utilizar su DNI sin problemas para cruzar la frontera hasta el 31 de diciembre de 2025.

El acuerdo del Brexit contempla también que los españoles residentes en el Reino Unido antes del 31 de diciembre de 2020 contarán con permisos y derechos de residencia, trabajo y sanidad. Eso sí, tienen que registrarse como residentes en el Sistema de Asentamiento antes del 30 de junio de 2021. Los residentes que hayan estado durante más de cinco años recibirán el estatus de asentado, mientras que los que no hayan estado ese tiempo tendrán que esperar para solicitar esa condición.

Los 76.800 británicos que vivían en Andalucía en 2020 y se encontraban en una situación de desamparo podrían ver la luz al final del túnel con este acuerdo del Brexit. Los andaluces residentes en el Reino Unido, por otro lado, cuentan a través de este acuerdo Brexit con una serie de normas para planificar todos sus viajes futuros hacia el país o de regreso a su hogar en Andalucía.-