Estos son las claves del mes de diciembre. Bancos Centrales. Pocos cambios podemos esperar en lo que respecta a medidas de política monetaria, que en diciembre tampoco mostraron diferencias relevantes en el tono dovish de su discurso habitual. El BCE mantuvo el guion tanto en importes como en plazos de sus medidas para ayudar al mercado. En términos generales el BCE ha dado al mercado lo que demandaba, que no era poco, sin embargo como era lo que se esperaba, la noticia fue acogida por el mercado con cierta apatía. La Fed una semana después no amplió  el  programa de compras pero mantuvo el discurso acomodaticio invariable de los últimos meses. Tanto FED como BCE siguen reclamando medidas de ajuste fiscal a los gobiernos, que aparentemente continúan dando patadas hacia delante, mientras la munición monetaria continúa erosionándose poco a poco con unos balances de los BC, cada vez más abultados.

Dividendos sector bancario.El Supervisory Board del ECB se mantiene cauto respecto a la retribución al accionista de las entidades. Los bancos, siempre que demuestren que son capaces de mantener inalterada su solvencia, podrán distribuir el menor de los siguientes conceptos, o un 15% de los beneficios de 2019-2020 o 20 bps de capital. Como la medida es de aplicación hasta septiembre de este año, cabe esperar que la mayor parte de las entidades retrase su decisión hasta el final de este plazo. A nuestro modo de ver se trata de un pay out muy contenido que no pondrá en peligro la solvencia de las entidades, pero también supone una cierta recompensa parcial para el sufrido accionista de los bancos europeos.

Covid 19. Pese al comienzo de los programas de vacunación a finales del mes, Diciembre ha sido un mal mes en términos generales para la evolución de la epidemia en los principales países desarrollados. Los incrementos de contagios y fallecidos han sido generales y ya estamos inmersos en una tercera ola de contagios. USA, India, Brasil, Rusia y UK continúan encabezando el ranking de contagios y fallecimientos.  Se  vuelve  a  hablar  de  medidas estrictas de aislamiento en algunos países.

Destacamos. Mientras  que la volatilidad  de los  activos de renta  fija ha alcanzado niveles mínimos históricos en 2020, la renta variable ha experimentado niveles de volatilidad extremadamente elevados durante este año que dejamos atrás. Salvo momentos de elevada convulsión, el comportamiento normal de la volatilidad de ambas familias de activos debería tender a converger y evolucionar de una forma algo más racional y pareja.

Si pensamos que lo lógico es que la volatilidad de los activos muestren una reversión de su comportamiento a la media, tendríamos que ver en los próximos meses una reducción de la volatilidad de la renta variable y/o un aumento de la volatilidad de los bonos. En el  actual  contexto acomodaticio de los bancos centrales, este movimiento en la volatilidad de los activos de renta fija no parece que pueda ser muy intenso, por lo que creemos que la reducción del diferencial entre ambas volatilidades tiene que venir más liderada por una reducción de la volatilidad de los activos de renta variable. Veremos a ver en los próximos meses.

Ver informe completo. Informe mensual de mercados Diciembre 2020