El Banco Central Europeo, en su reunión de política monetaria, intentaba dejar claro con un discurso comprometido, que está dispuesto a actuar en caso de que sea necesario: daba continuidad al actual programa de compras hasta septiembre de 2016 y recalcaba su flexibilidad a la hora de ajustar la magnitud, la composición y la duración del mismo. Analizando la coyuntura actual, el BCE revisaba ligeramente sus perspectivas de crecimiento económico para la UEM. También rebajaba las previsiones de inflación y no descartaba la posibilidad de tasas negativas en el corto plazo, transitorias. El discurso de Mario Draghi no fue suficiente para calmar las dudas en las bolsas europeas. En el cómputo global de la semana las caídas han sido generalizadas, el Ibex 35 se dejó un -5,38% (9.796 puntos), el Eurostoxx retrocedía un 2,85% (3.176 puntos). Al otro lado del Atlántico, también con pérdidas generalizadas, Dow Jones caía un 3,2% (16.102 puntos). Mejor comportamiento tuvo la deuda soberana a la que sí sentó bien el mensaje del BCE. El bono alemán a 10 años reducía su rentabilidad hasta el 0,68%; su homólogo español caía a niveles del 2,08%. También en Estados Unidos los inversores se decantaban por las compras como reflejaba el T-Note a 10 años, que recortaba 2,8 p.b. su rentabilidad hasta el 2,13%. En cuanto al precio del petróleo, éste frenaba su tendencia bajista a pesar de los últimos datos que muestran la desaceleración en el crecimiento en China y ello fue debido al menor procesamiento en las refinerías. Así, el barril de Brent se apreciaba hasta los 50,5& barril, (+0,96% semana). Con respecto al cambio Euro/Dólar, semana tranquila con pocas fluctuaciones hasta el discurso del BCE, que hacía que el euro se depreciara y se cambiara a 1,1137 dólares.                                            

Evolución de Mercado.-

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Niveles de Mercado.-

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