El informe de mercados de mayo de 2025 destaca un mes de abril marcado por una elevada volatilidad financiera, provocada principalmente por las políticas arancelarias impulsadas por la Administración Trump. Aunque se generó inquietud por una posible guerra comercial, el análisis considera que esta estrategia responde más a fines negociadores y de imagen interna en EE.UU. que a una voluntad real de ruptura comercial. Pese al riesgo, se mantiene la expectativa de una solución pactada que evite una recesión global. A nivel de política monetaria, el Banco Central Europeo (BCE) cumplió con las previsiones y recortó los tipos de interés en 0,25 puntos, dejando la Facilidad Marginal de Depósito en 2,75%. Por su parte, la Reserva Federal de EE.UU. decidió mantener sus tipos sin cambios, debido a la solidez de los datos macroeconómicos y a una inflación más resistente de lo previsto.

En términos de coyuntura económica, la Eurozona sorprendió positivamente con un crecimiento del PIB del 0,4% en el primer trimestre, mientras que la inflación subyacente repuntó al 2,7%. La región mantiene expectativas positivas en torno a futuros estímulos económicos, tanto a nivel nacional (Alemania) como europeo. En cambio, la economía estadounidense presentó una contracción del PIB del -0,1%, influida por un fuerte aumento de las importaciones y una desaceleración del consumo. A pesar de esta contracción, la inflación subyacente logró situarse por debajo del 3%, aunque persisten preocupaciones por el elevado déficit público y el impacto de los aranceles.

En el ámbito de la renta fija, se observaron aumentos notables en los diferenciales de crédito en Europa y EE.UU., sobre todo en el segmento de alto rendimiento (high yield), como reflejo de la incertidumbre global. No obstante, los bonos soberanos experimentaron una fuerte demanda como activos refugio, lo que provocó una reducción en sus rentabilidades. El posicionamiento estratégico del informe mantiene una sobreponderación en renta fija de alta calidad crediticia, considerando atractivas las rentabilidades actuales frente a la inflación esperada. En el segmento high yield, sin embargo, se adopta una postura más conservadora.

En cuanto a la renta variable, abril fue un mes de altibajos extremos. El índice S&P 500 cayó un 0,8%, aunque durante el mes llegó a perder hasta un 20% desde máximos, para luego recuperarse parcialmente. En Europa, el Ibex 35 logró cerrar con ganancias y el Euro Stoxx 50 limitó sus pérdidas. A nivel sectorial, destacaron positivamente los sectores de seguros y utilities, mientras que consumo, energía y telecomunicaciones sufrieron correcciones. A pesar de la volatilidad, el posicionamiento se mantiene neutral en bolsa, con una ligera infraponderación táctica en el mercado japonés.

Por último, a nivel global, se refuerza la sobreponderación en renta fija de calidad y se mantiene la neutralidad en renta variable. También se favorece una posición sobreponderada en el euro frente al dólar. La estrategia general sigue centrada en mantener la calma y evitar decisiones precipitadas ante la incertidumbre, confiando en que el escenario más probable será el de negociación y no el de confrontación abierta.

Ver informe completo. Informe de Mercados Banca Privada 2025 05