Andalucía es una tierra llena de encanto, pasión y grandes rincones donde pasar un buen fin de semana en familia. El turismo rural, en concreto, es una opción ideal para comenzar la reactivación económica de nuestra comunidad autónoma, disfrutando de una hostelería con muy buen trato y de unos alojamientos donde descansar tranquilamente durante las vacaciones de verano.
Atrás ha quedado la situación negativa que vivía el turismo durante la segunda Semana Santa con covid-19, con nuestras ciudades cerradas perimetralmente y las dificultades para moverse a disfrutar del turismo local. Este es un buen momento para empezar a viajar, descubriendo aventuras emocionantes con nuestros seres queridos.
Hay actividades fascinantes esperando a los andaluces, como las canoas por el río, el kayak o el senderismo por la montaña. Solo es cuestión de apuntarse al turismo colaborativo, para compartir un piso sin tener que recurrir a gastos fijos, compartiendo grandes momentos mientras cumplimos nuestros objetivos de ahorro en el menor tiempo posible.
Descubre la magia de Andalucía con estos siete destinos de turismo rural
Andalucía ha sido la región más beneficiada del impulso del turismo rural de interior en toda la península. En total, ha aumentado un 20% más el gasto de turistas nacionales respecto a 2019, demostrando que la recuperación económica pasa, sí o sí, por invertir en viajes a los pueblos y los rincones más maravillosos de esta comunidad autónoma. Estos son siete destinos del turismo rural andaluz con grandes perspectivas turísticas.
Grazalema (Cádiz)
Empezamos la ruta por el Parque Natural de Grazalema, uno de los grandes pulmones de Andalucía, con su fauna formada por aves de todas las especies y su flora, que incorpora alcornoques y encinas a una riqueza paisajística sin igual. El pueblecito de Grazalema es una visita obligada, porque está llena de espacios que demuestran su carácter antiguo: el Puente Viejo de Ronda te permite visitar la Cueva del Gato o dirigirte a ver los pueblos blancos de Cádiz: Zahara de la Sierra, con el castillo que controla el valle, o Setenil de las Bodegas, una localidad que se encuentra esculpida en la propia montaña.
Almodóvar (Córdoba)
A 22 kilómetros de Córdoba está situado Almodóvar del Río, un pueblo con mucho encanto donde puedes visitar el gran castillo que lo corona. Gracias a su arquitectura, sus 9 torres, el patio de armas, sus mazmorras y la capilla hexagonal puedes disfrutar volviendo atrás en el tiempo, a la época del medievo, pero también puedes volver al rodaje de la séptima temporada de Juego de Tronos, que tuvo lugar en su interior. Elijas la vista que elijas, no te arrepentirás, así que no dudes en planear un buen viaje de fin de semana a este territorio de ensueño.
Doñana (Cádiz)
Este espacio natural protegido está situado al suroeste de la península Ibérica, en su mayor parte en la provincia de Huelva y una menor parte en Sevilla y Cádiz, y es uno de esos lugares que debes visitar si eres un enamorado de las aves. Puedes coger la mochila, poner los bocadillos de toda la familia y dirigirte a las diferentes marismas, lagunas, pinares, playas y acantilados que te deparan estas zonas, junto con las famosas dunas en movimiento que recorre desde Matalascañas a la desembocadura del Guadalquivir, más de 25 kilómetros de playa virgen y arenas blancas que harán las delicias de los niños.
Sierra de Aracena y Picos de Aroche (Huelva)
Las dehesas de encinas y alcornoques son las grandes protagonistas en este emblemático rincón de Sierra Morena, al norte de la provincia de Huelva. Pero además de la flora puedes descubrir una fauna preciosa que se ha asentado en el territorio desde hace generaciones: buitres, barbos, cigüeñas negras y todo tipo de peces han hecho de este precioso hábitat su hogar. Está enmarcada como Reserva de la Biosfera Dehesas de Sierra Morena, está adherida a la Carta Europea de Turismo Sostenible y es considerada Zona de Especial Protección para las aves, por lo que puedes dedicar todo el tiempo que quieras a disfrutar de este gran enclave andaluz, siempre con respeto y guardando tus desperdicios para no ensuciarlo.
Tolox (Málaga)
En una ladera de la Sierra de las Nieves se sitúa el pueblecillo de Tolox, con Torrecilla como telón de fondo. En sus calles laberínticas pueden encontrarse talleres artesanos donde se trabaja la madera entre las casas blancas típicas de esta zona andaluza. Lo más destacable de esta zona son las murallas del Castillo, la construcción más antigua de la localidad, pero también puedes aprovechar para visitar el ‘barrio alto’ del pueblo, una zona perfecta con fachadas encaladas que guarda rincones llenos de flores.
Parque Natural de la Sierra Norte (Sevilla)
También en Sierra Morena se sitúa un enclave rural de los que dejan la boca abierta: el Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla, bordeado por embalses como el Melonares o Huesna del Sur, en una zona preciosa que destaca por sus bosques y dehesas. Dentro de él puedes ver lugares muy visitados como el Cerro del Hierro, un monumento natural increíblemente valorado por su belleza paisajística. Te recomendamos que eches un vistazo a cascadas como la del Huéznar o Huesna, a las que merece mucho la pena sacar fotografías panorámicas.
Castillo de Colomares (Málaga)
En Benalmádena puedes encontrar uno de los castillos más emblemáticos de Andalucía. Construido como un homenaje a la conquista de América por parte de Cristóbal Colón, con tres torres que representan los barcos de La Niña, la Pinta y la Santa María, con los que tocó tierras americanas durante el siglo XV. También puedes echar un vistazo a las calles empedradas de este tranquilo pueblo, donde podrás disfrutar de platos andaluces muy tradicionales como el gazpacho o el pescaíto frito.-