Dentro de las exportaciones españolas, el vino es uno de los productos que tiene más relevancia y goza de mayor prestigio en los mercados internacionales. Es normal, porque llega a países de todos los tamaños, desde Nueva Zelanda hasta Estados Unidos, y tiene una facturación total de unos 2.600 millones de euros anuales.
Los estudios anuales del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV) son una referencia para entender qué desempeño han tenido el vino español y andaluz en el extranjero. A través de tablas, gráficos y comparaciones es posible comprender distintos fenómenos como, por ejemplo, por qué el vino español lideró las exportaciones a Gran Bretaña en 2020, superando al francés y el italiano.
Este artículo pretende dar a conocer la realidad del sector vinícola español en el mundo durante el año 2020, poniendo especial énfasis en el papel que han tenido las exportaciones de vino andaluzas para el sostenimiento de la economía nacional.
2020: un año negativo para las exportaciones del vino español
Los datos reflejan que el vino español vivió una gran caída el año pasado. En total, las ventas alcanzaron los 2.012 millones de litros con un valor de 2.616,1 millones de euros, lo que supuso una caída del 3,6% y del 6% respecto al 2019, respectivamente. Las pérdidas de litros exportados fue de 126,8 millones; y la facturación, de 96,7 millones de euros.
El vino bag-in-box fue el más socorrido en el extranjero, con un crecimiento del 23% y un volumen de exportación que superó el 41%. En el otro lado del espectro estuvieron los vinos a granel, que produjeron caídas de 115,7 millones de litros; mientras que los espumosos y los envasados también se vieron afectados, con un total de 53,6 millones de euros y 81,5 millones de euros menos en cada caso.
El fenómeno más singular sucedió en las exportaciones al Reino Unido de enero a septiembre. Durante esta época, y con el Brexit ya superado, el país británico gastó un 6,8% más en vino español, mientras reducía sus importaciones del francés (en un 17%) e italiano (-9%). Las cifras establecen un aumento del valor y el volumen del vino español en un 12% y un 20% en Gran Bretaña, pero este no fue el único país que presentó números positivos. Otros países europeos como Suiza (12% en valor y 11% en volumen) y Holanda (12% en valor y 11% en volumen) también le acompañaron, de la misma forma que el país norteamericano de Canadá (13% en valor y 8% en volumen).
Fueron los países más alejados los que experimentaron mayores caídas en las importaciones de vino español. China (-29% en valor y -26% en volumen), Japón (-8,8% en valor y -4,4% en volumen) o México (-23% en valor y -31% en volumen) acusaron las restricciones internacionales y redujeron su interés por este producto, en una época que además se ve agravada por las dificultades que supone la crisis de la pandemia.
La buena noticia para los ingresos españoles es que el saldo comercial registró datos positivos, como viene sucediendo desde hace quince años. El balance es de 2.450,4 millones de euros, que surgen de la diferencia entre los 2.616,1 millones de euros facturados y los 165,7 millones de euros importados. En total, esta partida se ha incrementado un 5,7% anual desde 1995, de forma que la producción y exportación de vinos españoles ha ido superando el volumen de importaciones a pasos agigantados.
Gráfico con los destinos de exportación del vino español en 2020. Fuente: OEMV
Las exportaciones del vino andaluz: el futuro está en Asia
Las exportaciones de vino andaluz han tenido un papel moderado dentro del panorama exportador nacional. Andalucía se ha situado como la décima comunidad autónoma por nivel de volumen vendido en el extranjero, con 44,9 millones de litros (un -6,1% que en 2019), unas cifras que demuestran la estabilidad que ha vivido el sector vinícola frente a otras regiones, que han cosechado grandes pérdidas de un año para otro.
El futuro de las exportaciones andaluzas pasa, desde luego, por el mercado asiático. Las exportaciones de vino andaluz con este destino han crecido un 59% en la última década, hasta alcanzar los 5,4 millones de euros en 2019, y se espera que países como Japón o Taiwán realicen grandes importaciones en los próximos años.
Esta ha sido, precisamente, la misión comercial que ha tenido Extenda (Andalucía Exportación e Inversión Extranjera). La institución ha celebrado varias acciones promocionales en ciudades con un gran potencial económico, como Shanghai y Taipei, para dar a conocer los vinos de más de veinte bodegas andaluzas de distintas provincias como Málaga, Córdoba y la mayor en términos de exportación a Asia: Cádiz.
Estas medidas se encuadran dentro del Programa Activa Internacional, una iniciativa del Gobierno andaluz para impulsar la exportación a nuevos mercados durante la crisis de la covid-19. Los negocios de la región pueden valerse de este importante recurso para comenzar a planificar sus actividades internacionales en este 2021.
La importancia del asesoramiento personalizado es clave para poder elaborar una buena estrategia de exportación del vino. Caja Rural Sur ofrece apoyo a empresas, autónomos y emprendedores que quieran llevar sus productos a grandes mercados como Asia, con opciones de financiación internacional y distintos créditos enfocados al comercio exterior. Esto les permite contar con todo lo que necesitan para internacionalizar su actividad en buenas condiciones y lograr el éxito fuera de las fronteras andaluzas.-